Medias y vino tinto

Al llegar al lugar sólo había una mesa, una alfombra, una cena, una chimenea, por un momento ella pensó que todo estaría concurrido, sin embargo eran ella y él, y la música envolviéndolos con su sonido.
Él le pidió su abrigo y ella dejó al descubierto, un vestido que había elegido cuidadosamente para la ocasión, medias negras y zapatos a juego.
Le invitó a sentarse en la silla justo al frente, y ella recorrió su cuerpo con la mirada, esperando a que él hiciera el primer movimiento, sólo una mesa los separaba, un café, una vela, unas cuántas palabras.
Su risa resonaba entre deseos escondidos, un roce en la mano, después un suspiro.
Entre los regalos de la velada una botella de vino tinto aguardaba, dos copas esperando a ser usadas.
Una primer copa, más sonrisas, más miradas, menos palabras, una mano por debajo de la mesa tocando su falda.
Dos copas, cada vez más cercano, todo aquello que ataba poco a poco se iba soltando, más palabras al azar, sin sentido, perdidas, como la mano bajo su vestido.
Al fin él decide ponerse de pie, la toma y sienta sobre la mesa, y la besa, al fin la besa, ella lo rodea con sus piernas y se recorren los cuerpos liberan cadenas, abren secretos...

Lo que pasó después es un secreto de medias y vino tinto...

El no amor

¿Cuál es el amor real, al que deberíamos aspirar? En este momento tal vez pueda hablar de tres amores. 
El primero, apasionado, con todas las cualidades que el deseo te pide ver en una persona, pero también con todos los defectos que te hacen huir, esa clase de amor que es un cuento de hadas, una delicia nocturna, pero en la oscuridad invoca a los peores demonios, los más perversos, los más dañados, los más malditos. Ese amor, de cuentos de hadas, un amor musical, un amor de poesía, pero al final de cuentas, sólo cuentos o historias que terminan.
El segundo amor, que tal vez sea lo que necesitas, el que no tiene el defecto de la cadena, aquel amor que parece saber siempre lo que necesitas, el amor sensato, aquel amor tan estable, que no pasa nada. Ese amor que tal vez es el que marca tu vida, con el que pases tus años y formes una familia porque sabes quién es, sabe quién eres... ¿Lo sabe? ¿Lo sabes?
 Y hay un tercer amor, aquel amor que no debería ser, aquel amor que existe, DEMONIOS existe!, aquel amor que nunca será correspondido, el amor que llegó tarde, ese amor que te hace pensar, que te reta. Que llegó para irse, para no quedarse, para trascender en el intelecto, en el ser y en el alma...
Tal vez simplemente se deba aspirar al no amor.

Más perdida que nunca

Recuerdo que hace algún tiempo pensaba, que conforme pasara el tiempo, los años, los ayeres, los ahora, iría entendiendo cada vez un poco más la vida y mi existencia.
Lo lamentable es que en realidad sólo identifico mi existencia, me hago consciente de mí, de mi cuerpo, de mis cambios pero aún así siento que no me termino de conocer, que no termino de volver a ser yo, o que simplemente no termino de ser.
La soledad es una compañera amarga a la que he aprendido a aceptar, ya que de alguna u otra manera las personas no permanecen cerca, la ausencia es inevitable, y las que están, los que están, no terminan de aceptar o tomar un papel en mi vida, o a veces simplemente soy yo la que no sabe qué papel darles.
Es extraño que la compañía te haga sentir sola. A veces me gustaría sentir que pertenezco a algo, a mí misma, a algún sueño, una pasión, a un grupo, a un amor, pero las cosas no dejan de sentirse tan efímeras. De nuevo, nada permanece. 
Me siento eternamente agobiada y siento que corro, corro y sigo corriendo y la realidad es que no tengo la más mínima idea de hacia a dónde estoy corriendo. 
Es como vivir siendo un comodín, la amiga que te escucha, la persona que te cuida, quien atiende, quien enseña, sin embargo no me siento necesaria. El comodín de la persona que siempre estará pero no siempre es necesario y puede sustituirse con otra carta.
Es extraño sonreír, las risas espontaneas, los momentos agradables, todo eso se esfuma.
Río sin cauce, desbordado y sin destino. 
Más perdida que nunca...

MALDITA FRUSTRACIÓN

Primavera en Otoño, en Verano

Existen situaciones que son imposibles de controlar. Como la reciente llegada de la primavera, a mi otoño en verano. Quisiera poder explicar lo que la primavera significa para mi y tal vez si pudiera definirla utilizaría la palabra florecer. En tus primaveras floreció mi alma, y hablo de tus primaveras porque soy una flor, un Tulipán, un Tulipán caprichoso floreciendo en una época que no es suya y disfrutando deliciosamente de los rayos del sol. Estamos en pleno verano, no negaré que amo el otoño, uno podría acostumbrarse a vivir en climas templados para toda la vida y disfrutarlos. Pero la primavera llegó a mi vida. Qué dulce musa, Qué delicioso aroma. Amo tus colores, amo tus flores, amo tu sol penetrante que deja huella en mi piel, de ese sol de primavera que pinta pecas delicadas como gotitas de esperanza, como ese sol que marca y da vida a lo que se creía perdido en el invierno. Oh primavera! Qué bellos cantares, energía, placer. Primavera eres poesía, eres trazos en pincel, eres palabras en trinos de pájaros susurrando que la vida es bella. Quiero impregnarme del aroma de tus flores, del aroma que da vida.
Oh primavera si tu supieras...

El no final de la medusa.

Es increíble como aun a pesar de los años, a pesar de los momentos, de situaciones, del paso del tiempo, del caminar, de mis pequeños y grandes pasos, te sientas con la libertad de llegar a mi hermosa vida y agitarla.
Me duele más el pensar que ya no dolía y darme cuenta de que aun te tenía en las manos, creyendo que tenía bajo control los tentáculos y una vez más permití que me lastimaran, una vez más los toqué porque te dolía y seguía pensando que yo podía curarlos pero simplemente lastiman, hay cosas que no se pueden curar desde afuera, que debes sanar por dentro. 
De pronto es agradable culparte, hacer como que todo lo que dijiste fue por coraje.
De pronto es asfixiante el "me haces falta" más frases de sentencia, y quién lo diría si se puede matar lo que ya estaba muerto. 
No puedo contra tus mecanismos de defensa, no puedo con el hecho de que me conozcas tan bien que sepas como herirme aún con palabras bonitas.
No puedo con el dolor de la libertad. ¿Por qué duele? 
No te corresponde, no te correspondía venir a agitar mi mente, venir a implantar dudas donde ya no existían. Venir y recordarme los sueños, esos que se llevo la marea cuando cambiaste de rumbo, esos que no han regresado porque partieron una fría noche de enero, se fueron al abismo y mira, curioso, años después volvieron. 
No te correspondía poner en palabras mis pensamientos más oscuros, mis dudas más abismales, esas que están en mi día a día y con solo unos minutos los supiste identificar.
Haz que valga la pena, haz que valga la pena, haz que valga la pena, haz que la espera valga la pena.
Un si y un no en un mismo discurso, disociante, delirante, lleno de locura, lo-cura, mi cura.
Aun lo veo, debe dejar de existir, en pro de la libertad, se debe extinguir.
"Maletas, un triste adiós y un anónimo perdón"
Al final obtuve lo que estuve esperando durante años, y no me valió de nada, más que para darme cuenta de que en realidad eso no era lo que quería.

Con cariño y admiración...
Hasta siempre

Ecos

Quisiera ser un poco más, hacer un poco más o sentir un poco menos.
Quisiera ser un poco más valiente, no para ti, para mi misma y  decirme de frente lo que mi corazón late a gritos...
Quisiera a veces tener la determinación que veo en ti, para poder permanecer en el suelo y no volar, quisiera pensar que mi sentir se puede frenar.
Quisiera no sentir que todo mi ser se estremece, que mi garganta se seca, que el latido en mi pecho se detiene cuando leo tus no.
No, no, no, detente, ecos de un no. NO, NO, NO, NO, no, no no no.
A lo lejos y a lo cerca. Pensamientos, ecos de tus pensamientos, diciéndome a mi misma que no, porque no tengo el valor.
No tengo la determinación de decir que no.
Y por eso no digo que si.
Pero pequeño fantasma de amor, en el eco de tu negación a lo que no puede negarse, leo entre tus palabras definitivas que sentimos lo mismo...

Bloqueo

Es extraño después de una buena racha de creatividad aflorando por los poros como flores en primavera, como me encuentro en un tremendo bloqueo mental, donde los pensamientos de nuevo se vuelven turbios y no encuentro claridad. 
Una idea nada y pues, nada. No concluye, no existe, no fluye.
Apatía creativa, no hay figuras en pincel, tampoco en papel, no hay letras no hay canciones, no hay colores, no hay gises, no hay pintura no hay pensamientos claros, no los hay.
Bloqueo
Bloqueo
Bloqueo
Bloqueo
Bloqueo

Fluir

He decidido dejar de pelearme con la vida y disfrutar lo que me está dando. He decidido disfrutar esta incertidumbre sentimental. He decidido disfrutarte, disfrutarme, no buscarle un nombre, no buscarle un sentido. Más bien, agradecer que existe, que puede ser y que me hace sentir más viva de lo que me he sentido en mucho tiempo.
He decidido no poner más cadenas en mi vida, no más paredes, no más pelarme con lo inevitable. He decidido que todo esto me gusta, que me mueve, me da paz, me da calma.
He decidido dejarme fluir, y ha sido la mejor decisión en mucho tiempo. Vida, te estuve esperando durante mucho tiempo. Mucho tiempo en escala de azul y de grises, y de pronto la vida toma otros matices o tal vez, otros significados en los mismos colores. 
Ya no me causa más conflicto ser azul, morada, verde, escarlata, no me causa conflicto ser transparente, quiero que me veas, quiero que veas lo más real, lo que estaba escondido y que tu sin quererlo lograste rescatar. 
Fluir contigo, fluir sin ti, fluir con la vida.
Había olvidado lo que se sentía, lo que se sentía estar viva, tal vez estaba sola aun en compañía, tal vez hacía falta una revolución en mi vida. Y aunque nada pase o todo pase. En mi vida está pasando algo. Y eso por si mismo, ya es extraordinario.

El problema (Confesiones)

Me pregunto, si se podrá llegar tarde a la vida de alguien, y si ese tarde se podrá modificar a un "A TIEMPO".
La cosa, amigo,es que existes, eres, piensas, sueñas, que colapsas en mi mundo.
El problema tal vez es que me siento demasiado honesta, demasiado viva, demasiado cautivada. Mariposas, pensamientos, flores, lunas, estrellas, universos.
El problema es que fluyo a la perfección con lo que eres, o con lo que me muestras. El problema es que me gusta que me hagas pensar, retarme a mi misma.
Mi problema, es que me siento vista, me siento apreciada, siento que existo.
Un minuto, una hora, un eternidad, el tiempo carece de sentido y está bien. Podría contemplarte por horas para tratar de descifrar lo que eres.
El problema, es que me fascina sentirme de ese modo, me fascina convertirte en palabras, en poemas, en canciones. Eres arte, me fascina el arte.
Nueva musa que placer encontrarte. Que placer que existas. Que infernal el tiempo, que detestable el momento.

Nota: No encuentro fin en este momento para esta historia, posiblemente más adelante regrese a concluirla, no es que no esté terminada ahora, es que aun me falta descubrir qué pasa con todo esto.
Gracias por leer :)

El momento en que te solté

No puedo continuar más con esto, es cansado sostener tu deseo, es cansado cuidar de tus sentimientos cuando tu no haces nada por cuidarlos. Estoy cansada del papel de villana y de tu papel de mártir.

Tu eterna demanda absorbe mi energía y he de decir que estos días sin ti me han ayudado a respirar.

Querido amigo, te suelto, suelto tu deseo, ese deseo que revolotea a mi alrededor pidiendo más y más de algo que no existe. 

Pero, querido amigo, te abrazo, te abrazo como compañía, como ojos que te reconocen y oídos que te escuchan. Pero, no más como la villana que le da sentido a tu cuento. 

No merezco tal papel y no lo deseo. 

Hasta entonces... buena vida, viejo amigo. 

A medias

Me cuesta caminar, me cuesta pensar, me cuesta respirar, me cuesta confiar.
Camino, avanzo y los pasos no me llevan hacia ningún lugar, por más que avanzo regreso al mismo punto, nada cambia, nada se mueve aunque yo lo haga.
Pienso, pienso en qué me gustaría hacer, y no hay nada concreto, pienso que lo quiero todo, pero desconozco qué es el todo. Pienso que me gustaría saber qué quiero. Pienso que me gustaría saber que mi pensamiento tiene un propósito, pero igual que mi caminar, vuelve el pensamiento al mismo lugar.
Respiro, pero no siento que mi cuerpo reciba el aire, hay aire para existir, pero me pregunto dónde se encuentra el aire para vivir. Respiro y siento que justo antes de encontrar la paz, la respiración vuela a otro lugar.
¿Confío? No hay nada claro, solo cosas a medias, la medianía es absurda, es cobarde, pero tampoco me atrevo a salir de ella. Mi deseo en histeria sostenida muere de miedo al pensar en mover la tabla en la que me balanceo.
No entiendo, no sé de dónde viene la sensación de estar a medias, pero hace muchas respiraciones que no me siento llena.
¿Quién sabe?
Tal vez allá bien lejos se quedó mi mitad...

Allá bien lejos...

Y es que pasa que cada cierto tiempo se me hace un nudito en la garganta y me pregunto si siempre va a ser así cuando te recuerde.
Me recuerdo diciéndole a una amiga, que los verdaderos amores son para siempre aunque no permanezcan, que el amor muchas veces se transforma y abre paso a otro tipo de amor, que tal vez se recuerde con cariño o tal vez con melancolía.
Una vez me dijiste que lo nuestro era ese amor que siempre nos había hecho falta, y ninguno de los dos supimos qué hacer con tanto. Ya no está claro quién era la rosa y quién el principito.
La verdad es que a veces cuando te extraño, extraño la sensación de tenerlo todo, sobre todo la claridad de lo que quería en la vida, nunca aparecieron dudas, pero estaban "bien escondidas". 
Un tropiezo, dos tropiezos, tres tropiezos, una lagrima, una risa, una muerte. La muerte del amor y la vida a la necesidad.
Esta noche en particular, recuerdo lo bonito, eso que me hace nuditos el corazón y ni sé por qué. Tantas vidas han pasado desde la existencia cósmica de la utopía del amor, como días han pasado en que la vida cada vez se ve mejor aunque no estés.
Perdimos, pero ganamos. Firmamos nuestra sentencia al reírnos de la vida y sus probabilidades, tan jóvenes y confiados de la existencia de los castillos y los para siempre y crecimos al darnos cuenta de que los castillos eran de cristal y los cuentos siempre tienen final, porque al final son eso, sólo cuentos. Vale decir que no eras el amor para mi vida, lo demás está dicho. 
Alguien dijo que las palabras se las lleva el viento, pero tal vez ese alguien no conocía el amor, recuerdo las palabras y los hechos, las que me dieron vida y las que jalaron el gatillo, y no, no se las llevó el viento.
Quién diría agridulce ser, que un día de mayo años después, estaría escribiendo palabras de olvido y de recuerdo cuando los planes eran otros. 
Allá bien lejos estás bien, allá donde sólo eres palabras bonitas, memoria de caricias, letra de una canción de amor y  notas de una guitarra.
Allá bien lejos como recuerdo estás bien. Bien lejos donde no te pueda ver.
Allá donde no se me note el nudito que me hace escribir palabras o pintar medusas.

Allá bien lejos...

Definitivamente tal vez

Hay algo dentro de mi, apoderándose de mi cordura, de mi control, de mi sentido común, de mi realidad, de mi fantasía.
Entra, sale, me retuerce, arde, quema, flota... yo floto, y se siente tan bien.
Es atemporal, sin principio ni fin, desconozco el comienzo y no quiero que termine.
Me gusta la palabra, me gusta el pensamiento me gustan las ideas...
Disfruto la incertidumbre, disfruto la nada, me gusta saber que pasa de todo y que nunca va a pasar nada... y se siente tan bien.
Mi cuerpo reacciona a la vida, la vida que encontró entre palabras rebuscadas, siente, siente, siento...
Despierta en mi, quiero poder, quiero conquistar el mundo, quiero volar, quiero que me veas y quiero que no digas nada
Locura, lo cura, me cura, soy sensaciones, soy emociones, el deseo gira, gira, gira, y no quiero que se detenga, no quiero que caiga...
Soy fuego, he recobrado parte de mi identidad, he recuperado parte de lo que estaba dormido, dormido!, no lo había perdido...
Entre palabras he encontrado mi voz, me he recobrado un poco.
Puedo respirar
Definitivamente tal vez, esto tenía que pasar.

Soldado caído

¿Cuántas veces puede romperse algo y repararse antes de volverse inservible?

Los roces entre personas son comunes al relacionarse entre sí, ya que bueno, cada cabeza es un mundo y supongo que dentro de nosotros hay un pequeño soldado que busca proclamar la tierra como suya y que su punto de vista sea el tomado en cuenta. Si bien estamos de acuerdo en escuchar y aprender de otros, cuando se trata de ganar o perder, no siempre nos gusta pensar en la parte de que posiblemente perdamos.

¿Se podrá considerar egoísta querer detenerte un poco y dejar que tu sentido común sea el que reine y no dejar paso al del otro?

¿Cuántas veces puede romperse algo y repararse antes de volverse inservible?

Cuando una relación humana se fractura queda siempre un espacio, nunca sana totalmente y puede que se reinvente o que viva con esa fractura causando problemas siempre a la mínima oportunidad.

Un soldado no debería querer conquistar una tierra que ya está proclamada. Es como querer ponerle el nombre propio al psicoanálisis cuando todos sabemos que es de Freud.

La vida da vueltas, subes bajas regresas.

Eres conquistador, o conquistado

Eres soldado caído.

Pero hasta un soldado caído en una muerte metafórica puede volver a levantarse y pelear. 

Pulsiones

A veces me es importante que los ojos de otros me perciban, me vean, el mundo visual es muy seductor, normalmente me he percatado que veo al otro para ver si me está viendo, y poder reafirmarme a través de tu aceptación o rechazo.

Quiero ser visible, quiero dejar de formar parte del muro, de la barrera entre nuestra realidad y la realidad social, no quiero ser un fantasma, tampoco quiero ser un secreto, no estoy dispuesta a no ser vista, y a que no permitas que otros me vean...

Me agobia la autocomparación el ver cómo ves a la humanidad, y como la humanidad no ve que me ves a mi. Que sentimiento tan irritante, que pensamiento, sensación, pulsión  tan autodestructiva,tan inherente al deseo.

QUÉ CANSADO ES ESTAR EN ESPIRAL, QUIERO! QUIERO! QUIERO! QUIERO QUE CAIGA MI DESEO!!!!!!!!!!!!!

Necesito un descanso, necesito dejar de desear ser vista, quiero ser invisible para volverme visible a mis ojos.

Eterna guerra, siendo y no siendo y desconociendo.

Aliado y enemigo a placer, cuando quieres me abrazas en la seguridad y luego me sueltas al abismo de aquello que no puedo comprender, o que en una forma más real, simplemente no quiero mirar

Mírame! Soy real, soy más que una simple imagen, soy más que pensamiento, más que acciones, más que palabras. Soy un universo, soy inmensa soy eterna, soy infinita.

MÍRAME! 

MÍRAME!

MÍRAME! 

¿Me verás hoy espejo?

¿Todavía le amas?

No, ya no te amo, ya no te pienso, ya no te escribo, ya no eres parte de mis pinturas, no te he retratado más, no hay más medusas, no hay más ver lo invisible con el corazón... Ya no pienso en las canciones, ni en tu guitarra... No pienso en los paseos al atardecer, en las noches de baile, ni en tu cara al amanecer...
Ayer olvidé  tu aroma y la textura de tu piel, ayer olvidé el sonido de tu voz cantando te amo al oído. Ayer olvidé a tus abuelos y sus consejos sobre el amor, olvide tus ojos profundos y cómo me llamabas amor...
Olvidé el cine, y las serenatas, olvidé mis malos hábitos al cocinar que no te gustaban
Olvidé nuestros planes a futuro, la imagen de los niños corriendo cerca de la estatua que tanto odiaba, olvidé los fines de semana de desayunos en la cama...
Olvidé que mis padres te amaban y mi familia disfrutaba de tu compañía, olvidé el karaoke, olvidé nuestras poesías...
Olvidé los detalles, olvidé las flores, olvidé como jugabas con mi cabello...
Olvidé lo irritante que eres al perder, tu manera tan peculiar de comer, y esa ropa amarilla que pensabas amaba pero nunca me gustó
Olvidé los gritos y las peleas que no entendía, olvidé en qué momento nos perdimos y en qué momento me dí por vencida...
Olvidé la cerrada del castillo, olvidé que hice de tus brazos mi hogar
Así que si me preguntas si todavía te amo la respuesta es no, ya no te amo, ya no te sueño, ya no te recuerdo, ya no estás más

Te quiero aquí y no allá

La distancia puede estar presente de muchas formas, ya sea en kilómetros o en una distancia tan grande como un amor que se desvanece en el viento.
Muchas veces me he confrontado a mi misma y llego a la misma respuesta... el amor por si sólo no basta... el amor requiere compromiso, respeto, confianza, comunicación... porque sin eso, el amor deja de ser bonito y se comienza a sufrir en vez de disfrutarse...
Lo irónico del asunto es que cuando estás más lejos, más cerca me siento de una mi misma que me agrada, pero me alejo de la que se siente bellamente enamorada
La realidad es que no puedo amar a un fantasma, no puedo amar a alguien que no está, es por eso que te quiero aquí y no allá, no en la indiferencia, no en la lejanía, no en la falta de comunicación
Te quiero aquí y no allá, donde te pueda amar real, donde pueda amar lo que realmente eres y no lo que imagino de ti.
Te quiero aquí y no allá donde mi respuesta y solución es el adiós, te quiero aquí en los planes y en los sueños que compartimos, te quiero aquí en los besos y en las caricias, en los buenos días y en las alegrías...
Te quiero aquí y no allá, no allá donde te voy a olvidar...